Desafíos y Oportunidades de IFRS 9 para Profesionales del Seguro: Claves para su Implementación Exitosa
El propósito de la sesión formativa organizada por GestyFor es proporcionar una comprensión amplia de IFRS 9, relativa a los instrumentos financieros, a los profesionales del seguro.
I.- Contenido
La Norma Internacional de Información Financiera 9 (NIIF 9) se divide en tres partes:
- Clasificación y Medición de Activos Financieros: que establece las reglas para la clasificación y medición de los activos financieros en los estados financieros.
1.1 Clasificación de Activos Financieros
El proceso de clasificación en la NIIF 9 se basa en dos criterios fundamentales:
- El modelo de negocio de la entidad en relación con la gestión de los activos financieros.
- Las características de los flujos de efectivo contractuales del activo financiero.
Se identifican tres categorías principales para la medición de los activos financieros:
- Coste amortizado: que incluye los activos financieros que se gestionan con la intención de obtener flujos de efectivo contractuales, y cuyos flujos de efectivo contractuales representan únicamente pagos de principal e intereses (SPPI).
- Valor razonable con cambios en otro resultado integral (FVOCI): que incluye los activos financieros que se gestionan tanto para recibir flujos de efectivo contractuales como para ser vendidos, y cuyos flujos de efectivo representan únicamente pagos de principal e intereses (SPPI).
- Valor razonable con cambios en resultados (FVTPL): que abarca todos los demás activos financieros que no cumplen con los criterios anteriores, y se miden a valor razonable con cambios en resultados.
1.2 Clasificación de Pasivos Financieros
En general, los pasivos financieros se clasifican a coste amortizado. No obstante, existen excepciones, especialmente cuando se designan para ser medidos a valor razonable con cambios en resultados para reducir o evitar asimetrías contables.
- Deterioro del Valor: Este apartado aborda el reconocimiento de pérdidas crediticias esperadas, lo que mejora la capacidad de la entidad para prever y gestionar riesgos crediticios en su cartera de activos.
El modelo de deterioro introducido por la NIIF 9 se basa en el concepto de pérdidas crediticias esperadas (ECL), reemplazando el modelo de pérdidas incurridas de la NIC 39. Las entidades han de reconocer las pérdidas crediticias desde el momento en que se reconoce el activo financiero, sin necesidad de esperar a que ocurra un evento de pérdida.
La IFRS 9 prevé tres métodos para estimar las pérdidas por deterioro estimadas, en función de la evolución o situación en la que se encuentren los instrumentos financieros.
- Contabilidad de Coberturas: El enfoque de la contabilidad de coberturas bajo la NIIF 9 está más estrechamente alineado con la gestión de riesgos y las actividades económicas de la entidad. Se reconocen tres tipos de cobertura:
- Cobertura de valor razonable: Esta cobertura se utiliza para proteger el valor razonable de un activo o pasivo frente a cambios en tasas de interés, tipos de cambio, entre otros.
- Cobertura de flujos de efectivo: Se emplea para proteger la variabilidad de los flujos de efectivo esperados de un instrumento financiero reconocido o previsto para el futuro.
- Cobertura de inversión neta en una operación en el extranjero: Esta se utiliza para proteger una inversión neta en una operación extranjera frente a fluctuaciones en la tasa de cambio.
II.- Implicaciones en las Entidades Aseguradoras
El sector asegurador enfrenta desafíos particulares en la implementación de IFRS 9, dado que sus operaciones incluyen la gestión de carteras de activos financieros destinados a cumplir con las obligaciones derivadas de los seguros. Las principales implicaciones de esta norma se centran en cómo clasificar y medir dichos activos, y su interacción con las carteras de pasivo en el marco de la IFRS 17, así como en el reconocimiento y medición de las pérdidas crediticias esperadas.
III.- Conclusión
La norma IFRS 9 supone una transformación considerable en la contabilidad de los instrumentos financieros, ofreciendo un marco más detallado y relevante para la valoración de activos y pasivos financieros. Para las compañías aseguradoras, la adopción de esta norma presenta retos especiales debido a la complejidad inherente a su modelo de negocio y a la gestión de sus carteras de inversión. No obstante, una aplicación adecuada de IFRS 9 puede incrementar la transparencia y mejorar la comprensión de los riesgos financieros, lo que resulta beneficioso tanto para la entidad.
La transición hacia IFRS 9 exige una planificación cuidadosa y un enfoque riguroso para gestionar los cambios en la clasificación y medición de activos, el reconocimiento de pérdidas crediticias esperadas y la contabilidad de coberturas. En definitiva, el éxito en la implementación de IFRS 9 dependerá de la capacidad de las entidades para ajustar sus sistemas y procesos, así como para comunicar eficazmente los cambios.
25/10/2024®Fuente: GestyFor
